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Curiosamente
fue un chileno el primer Hispanoamericano que saltó en paracaídas
desde un avión sobre América. Fue en 1924 tras la exhibición de un alemán, Otto Heinecke, adelantado a su tiempo, que efectuó un salto de demostración
con un rudimentario paracaídas de su invención. Las autoridades
militares, que aún no habían salido de su asombro, autorizaron a un
espontáneo teniente que solicitó permiso para saltar. Carecía,
naturalmente de experiencia y preparación, pero salió perfectamente de
su inesperado salto.
El
ejército chileno consideraba indispensable contar con tropas escogidas,
de alta profesionalidad y capacitadas para operar tras las líneas
enemigas. La posibilidad de que los mandos pudieran contar con un
nutrido cuerpo de profesionales selectos que, conocedores de todas las
técnicas de combate moderna, penetraran profundamente en territorio
disputado, sólo era posible contando con un cuerpo de operaciones
especiales paracaidistas. Desde comienzos de la segunda guerra mundial
los alemanes habían demostrado en Bélgica y Holanda las enormes
posibilidades militares de un paracaidista. Acontecimientos que los
mandos chilenos siguieron con gran interés, sacando sus propias
conclusiones.
Conscientes
de aquella imperante necesidad, en
1964, veinte años más tarde de que los aliados confirmaran en
Normandía aquellas posibilidades, se tomó la decisión de crear una Unidad de Paracaidistas. Un
grupo de militares recibieron un curso de adiestramiento en la
"Escuela de las Américas", centro de instrucción
norteamericano situado en la Canal Zone de Panamá |
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El
20 de abril de 1965, en Peldehue, a 40 km. de Santiago, se
iniciaron los entrenamientos. Muy poco tiempo después, el 20 de agosto, desde un
bimotor
C-47, se efectuó el primer salto
del "Batallón de Paracaidistas del Ejército" a las órdenes
del capitán Dante Iturriaga. Esa fecha sería designada
y celebrada como "Día del Paracaidista" por las
posteriores promociones. Cerca de 200.000 saltos perfectos han
confirmado la eficacia de su instrucción. (*)
Emblema de
Maestro paracaidista |
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Con
anterioridad, ya Chile había preparado una primera promoción de
"Comandos" en 1962 (octubre-noviembre) y otro el
año siguiente, con la colaboración de Rangers y Special
Forces US en la Escuela de Infantería. Con ello se estaba
gestando la "Escuela de Paracaidistas y Fuerzas
Especiales del Ejército de Chile".
(***)
Creada
la "Escuela de Paracaidistas y Fuerzas Especiales",
poco después completaría su denominación a la definitiva de
"Escuela de Paracaidistas y Fuerzas Especiales del General
de Ejército Don Bernardino Parada Moreno".
Los
paracaidistas se nutren sólo de voluntarios (oficiales,
suboficiales y tropa) de otras unidades del ejército
chileno.
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Paracaidistas
chilenos (se aprecia el emblema de hombro en el paracaidista de la
derecha de la foto) son encargados de detener estudiantes
durante las manifestaciones de 1968. |
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Tras
un curso en la Escuela de un mínimo de cuatro semanas (la última
destinada a 5 saltos) los alumnos que han finalizado el curso
reciben los distintivos y la boina negra que los identifica y
enorgullece. Los voluntarios cumplirán un servicio de catorce
meses (****)
Para
su equipamiento utilizaron cascos norteamericanos M-I y M-IC. En
cualquier caso, sus sotocascos recibieron algunos cambios que los identifican. |
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Estos
cascos fueron posteriormente sustituidos por el modelo
surcoreano de plástico balístico y con
cascos Mº FJ-59 de origen alemán.
Funda de
camuflaje reglamentaria, rodeada con una banda elástica,
sobre un casco M-I de paracaidistas chileno (no aparece el
correspondiente barboquejo del casco de acero). (Col: A.
Peñaloza). |
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(*)
Desde 1971 se enseñan las tácticas HALO-HAHO
por personal que, merced a la colaboración norteamericana, había
recibido un curso de 8 semanas. Cursos limitados a pequeños
grupos de especialistas.
(**)
En
la "Escuela de Paracaidistas y Fuerzas Especiales"
se imparten cursos de perfeccionamiento de otra
especialidades del ejército. |
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Entre
esos otros importantes cometidos de la Escuela de PP. y FF. EE.,
es la formación y adiestramiento los "Comandos"
chilenos, así como los especialistas que reciben cursos de
Combate Especial. |
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La
Escuela de PP. y FF. EE. de Peldehue, que prepara a los oficiales
Paracaidistas con cursos de Paracaidistas, Comandos, Combate
Especial, Instrucción de Comandos, Parabuzos, Tirador Emboscado,
Asalto Aéreo, Jefe de Saltos, Guías de Lanzamiento, Empaque y
Mantenimiento de Paracídas, Salto Libre Deportivo-Militar y Salto
Libre Militar. Para ello, la Escuela cuenta con unas instalaciones
muy completas que incluyen la Cancha de caída de aterrizaje,
Cancha de arnés de columpio, Cancha de arnés
suspendido, entre otros elementos de enseñanza y
adiestramiento.
(***)
Los nuevos complementos laterales incorporan una nueva hebilla con
ruleta moleteada, similar a la utilizada en el casco MARTE
del ejército español. |
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ORGANIGRAMA
PARACAIDISTA |
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Batallón de
Paracaidistas |
Comando
de Paracaidistas |
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Batallón
de Paracaidistas |
Cía.
de Plana Mayor |
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Cías.
de Paracaidistas |
Cía.
de Morteros |
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|
Cía.
de Paracaidistas |
Comando
de Compañía |
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Cía.
de Paracaidistas |
Secciones
de Paracaidistas |
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Sección
de Morteros |
A
su vez, forma parte del Organigrama de la Brigada de Fuerzas
Especiales. Su entrenamiento incluye tácticas guerrilleras tras
las líneas enemigas. Su armamento básico se basaba en fusiles de
asalto SIG-542 FAMAE, de 7,62mm., y ametralladoras ligeras
SAF FAMAE de 9 mm. Como cuerpo especialmente tratado por el
Alto Mando, se halla siempre pendiente de la adopción de las
novedades armamentísticas adecuadas a sus funciones.
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