Según afirmación de Sir Wiston Churtchill, "La caída de Singapur ha sido el mayor desastre y la mayor capitulación de la historia británica".

La rendición de la fortaleza inexpugnable fue, en efecto, la mayor derrota inflingida al Imperio Británico desde que  Cornwallis rindió Yorktown en la Guerra de Independencia Norteamericana.

Y no era para menos. 138.700 bajas, de ellas  130.000 prisioneros, eran unas pérdidas que propiciaron una debacle en las defensas occidentales en Asia Sudoriental y que proseguiría pagándose en la postguerra.

Expulsados de la península de Malaca, británicos, australianos e indios se refugiaron en el "Bastión del Imperio", Singapur, una isla en su extremo sur, sin aviación ni apoyo naval, mientras el XXV ejército del teniente general Yamashita atravesaba con lanchas neumáticas y metálicas el canal que la separaba del continente, el 31 de enero de 1942. (A)

Singapur era considerada una plaza irreductible. Recientemente de había creado la gran Base Naval para protección de la flota en el Pacífico y una larga cadena de baterías de costa de gran calibre, con numerosas piezas de 381mm (15"), piezas similares a las que se montarían en el acorazado Vanguard en 1945 (que sería el último acorazado construido en el mundo) garantizaban cualquier ataque por mar.

El 9 de agosto es el día de la Fiesta Nacional, día de la Independencia desde 1965, pero el día de las Fuerzas Armadas es el 1º de julio, cuando se celebra el desfile.

A estas cifras hay que añadir la Policía y la Policía marítima (11,600) y la Fuerza Civil de Defensa integrada por unos 100.000 efectivos.

Las tropas se hallan acuarteladas en diferentes puntos como Mandai y otras islas, pero sus ejercicios y maniobras, por falta de espacio vital, se efectúan en terceros países, generalmente en solitario.

En las  Singapore Armed Forces (SAF) existen problemas étnicos y religiosos principalmente con referencia a los soldados procedentes de Malasia, aunque oficialmente no existen discriminaciones (hasta que se cerró la frontera, tras la definitiva independencia, la inmigración de malayos fue muy importante). 

Pero también el M-1 era ya un casco familiar en la tropa singapurense a causa de la colaboración existente con Estados Unidos que equipaban también a algunos de sus aliados de la región.

Soporte reforzado

Singapur, como aliado, tiene un importante acuerdo con Estados Unidos que permite a sus buques de guerra el acceso a la base naval.

 Consecuencia de todo ello fue la continuación de uso del M-1 en los años 80, pero con un casco clonado.

Casco clon Mº M-1 del ejército de Singapur, con funda camo reglamentaria. Col: P. Santi.

Otra funda de los años 80 cuyo esquema sería calcado en los posteriores C-1. "Museum of Singapore Army". Foto: D. Célice.

En estos cascos se conservó en el Liner la guarnición tipo Cradle (cuna) adoptada en los casco M-I norteamericanos de mediados de los 60, aunque la aparición del Mº PASGT también influyó a la hora de incorporar el nuevo barboquejo con otras influencias, como la del francés Mº 78 Tap.

Se adoptó el sistema de tres puntos de anclaje (con anilla posterior) y ajuste de la mentonera doble tensada en una anilla y fijada con velcro.

Su uso se simultaneó con un nuevo casco, el  Mº C-1 de kevlar.

En el "Museum of Singapore Army" se expone un casco M-I clon, fabricado en Titanio, con un peso de 760gr. El prototipo corresponde al proyecto iniciado en 1968, para equipar a las SAF con un casco más ligero y resistente. Los altos costes de la época hicieron prohibitiva su producción, teniendo que posponer los estudios hasta hallar una mejor solución que llegaría con la aparición de nuevos materiales.

La adopción de un nuevo casco, del tipo PASGT, fabricado principalmente por la Silver Star Co, Ltd., empresa de origen surcoreano "personalizó" las Fuerzas Armadas de Singapur (Tentera Singapura, en malayo).

Se trata de unos cascos que reproducen el modelo norteamericano, con algunas peculiaridades.

A diferencia del PASGT US, la guarnición es similar a la de los cascos norteamericanos M-I de los año 60/70, de tipo Cradle, incluida sudadera y grapas.

Otra peculiaridad es la inclusión de un trapecio de neopreno en la parte posterior.

El trapecio protector de neopreno se sujeta con el zuncho de la guarnición a una ranura en "U".

Se trata de un suplemento nuquera similar al entregado en el  kit (Foam Impact Liner) de adaptación del PASGT norteamericano para su uso por tropas paracaidistas.

El barboquejo tiene tres punto de apoyo.

A diferencia de la anilla posterior, para deslizamiento del atalaje, las laterales cuentan con hebillas de ajuste dentadas. En cualquier caso basculan sobre soportes fijados con tres remaches.

El barboquejo, de tejido, forma mentonera desdoblada, al estilo británico, con terminales metálicos de latón. Las anillas y hebillas también son de latón cobreado.

El primer modelo C-1 disponía de una anilla para ajuste en el lado izquierdo del barboquejo y repetía el sistema adoptado en el M-1 clon.

Una vez centrado con los tiradores laterales, el ajuste de la mentonera se conseguía tensándolo sobre la anilla y fijándolo con las bandas de velcro.

Sistema de ajuste de la mentonera con velcro.

Pronto se incorpora un nuevo sistema de barboquejo formado por dos piezas cosidas, formando la mentonera doble, también para tres puntos de anclaje.

El nuevo atalaje incorpora un enganche rápido de material plástico, manejable con una mano.

Sus extremos también están rematados con terminales metálicos de latón.

El nuevo barboquejo se tensa con los tiradores laterales sobre las anillas dentadas. Previamente se ha ajustado sobre la anilla del enganche rápido.

Tensado de las anillas laterales y enganche rápido también ajustado

Se mantiene el pintado woodland en origen.

Los seis tornillos de cabeza redonda con ranura han sido pintados tras su colocación.

Los soportes de las tres anillas para los atalajes se fijan al casco mediante juegos de tres remaches de cabeza pequeña (son útiles a la hora de identificar este tipo de casco).

Juego de remaches del soporte para la anilla lateral.

A partir de 1993, los cascos Mº C-1 fueron distribuidos en color uniforme verde oscuro sobre superficie rugosa.

Col: Timur S.M. Tunggadewa

La normalización de la nueva presentación permitió su entrega a un mayor número de destinos.

El resto de las características se mantuvo, si bien, también se utilizaron sudaderas de piel clara.

Cortesía J. A. Jiménez

Los cascos C-1 han contado con diversos atalajes, siempre con tres puntos de apoyo, mentoneras de cazoleta y enganches triangulares.

Para facilitar el camuflaje de los cascos de color uniforme se distribuyeron redes con cintas de tejido, tipo salade.

Etiqueta de este C-1:

Etiqueta de un Mº C-1 de talla S de 1992

(A) Los ingleses consideraban impenetrables las selvas de Malaca, que no permitirían acercarse por tierra a un ejército enemigo. Por ello, todas las medidas preventivas se dirigían al mar, como las baterías artilleras que estaban orientadas al Este y Sureste. No podían comprender que un ejército equipado con bicicletas (sus 30.000 efectivos contaban con más de 18.000) y una alimentación tan sobria como un plato de arroz, pudiera presentarse a las puertas de Singapur tras empujar a las tropas de la Commonwealth hasta los confines de la península, a las puertas de la ciudad. Ya en la costa arenosa del estrecho de Johore, una compañía japonesa equipada con bicicletas ha tendido una pasarela para superar un puente destruido

Pero se carecía de aviación y una adecuada artillería antiaérea,  y la flota, con los grandes buques que deberían desbaratar cualquier intento de desembarco el las costas cercanas, habían sido hundidos (el moderno acorazado británico Prince of Wales y veterano crucero Repulse, que navegaban escoltados por los destructores Express, Elektra, Vampire y Tenedos, se hallaban en el fondo del mar).   Noticia de prensa: "A través de la jungla de Malasia las tropas japonesas avanzan hacia Singapur, la gran base inglesa del Extremo Oriente, hoy en grave riesgo. Durante muchos años, el Gobierno inglés concentró sus esfuerzos en aquella base, llave del Pacífico, donde acumuló los más formidables instrumentos para la guerra defensiva de que hoy se dispone. Ejemplo es el cañón gigante de esta fotografía que apunta hacia el estrecho de Malaca su descomunal calibre".

Los buques habían sido hundidos por cazas procedentes de portaaviones cuando aún era creencia generalizada entre los militares occidentales, que los japoneses, debido a las características de sus ojos oblicuos, no podían pilotar esos aviones.

La base, cuya fortificación se inició en 1921, había sido concebida para resistir un ataque o asedio hasta la inevitable llegada de una poderosa escuadra británica. No estaba prevista la 2ªGM y que la flota de guerra no pudiera abandonar otras aguas desde las que necesitaban defender la metrópoli.

La magnitud de los cañones instalados se había divulgado ampliamente como parte de la disuasión y, tanto británicos como la prensa internacional, consideraban la plaza inexpugnable gracias a ellos, por lo que los famosos cañones eran aireados constantemente en las noticias y su patente inutilidad supuso una general sorpresa y decepción. Noticia de Prensa: "He aquí uno de los grandes tubos de los cañones de más de 450mm (sic), los de mayor calibre fabricados hasta hoy, que protegían la base naval de Singapur, y que han resultado totalmente ineficaces para la defensa contra el ataque por tierra".

(B) Los japoneses habían desembarcado simultáneamente el 8 de diciembre de 1941 en el noreste de Malaca, (18ª División) anulando la base británica de Kota Bharu  a las 12,25 (90 minutos antes del bombardeo de Pearl Harbour) y en dos puntos de la costa de Tailandia (5ª División), cuyo gobierno colaboracionista facilitó el paso de sus tropas hasta la  la península.

Los aliados se vieron pronto empujados hasta los confines de la península, sin poder entender muy bien qué estaba pasando. La selva impenetrable era aliada de los japoneses a los que apodaron "macacos", como unas familias de simios del territorio. Pero este calificativo estaba muy lejos de ser aplicado como algo peyorativo.   En la ciudad de Penan, centro estratégico de la península de Malaca, desembarcaron los japoneses por sorpresa. Entre el inmenso botín conseguido figuraban miles de automóviles de turismo aparcados en las llanuras colindantes

Las tropas japonesas habían sido seleccionadas cuidadosamente y pasado un intenso entrenamiento para el destino previsto, aprovechando de cada uno todas sus capacidades para cada misión.

Rompiendo todos las tácticas clásicas de las academias militares, aprovechaban las dificultades de la selva como una ventaja. Si un oficial aliado, ante la presencia de uno de los innumerables pantanos, daba orden de rodearlo hasta situarse nuevamente en el sendero, los soldados japoneses habían aprendido a atravesar esos pantanos, caminando sobre las raíces de los grandes árboles o plantas acuáticas, sorprendiendo al enemigo en todo caso. Como los "macacos", eran capaces de avanzar en grupo saltando de árbol a árbol, mantener puestos de observación en las copas de los árboles o instalarse pacientemente como francotiradores, despreciar los senderos y obstaculizar la retirada enemiga con innumerables trampas aprovechando las oportunidades del terreno que únicamente ellos eran capaces de apreciar (tácticas que serían enseñadas a la resistencia vietnamita tras la rendición de Japón. Ver casco para el sol, de Vietnam). Eran maestros en el camuflaje, pintándose de verde para integrarse entre las sombras de la jungla.

Las tácticas habían sido cuidadosamente preparadas antes de la guerra. Llamaban a los oficiales británicos por sus nombres desde fuera de sus acuartelamientos, para ser abatidos inmediatamente a su salida ante la falsa llamada. Creaban situaciones de desconcierto constantemente, gritando órdenes en inglés que generaban enorme confusión. En su retirada a Singapur, los aliados tuvieron que abandonar buena parte de su material, entre el que figuraban tanquetas Bren-carrier británicas que fueron adoptadas por los japoneses en su avance ya que, o estaban intactas o fueron fácilmente reparadas

El descanso de los aliados era roto con falsos ataques, ruido de tanques y tabletear de ametralladoras, con grabaciones efectuadas con anterioridad a la guerra, que también incluían explosiones de granadas y desgarradores gritos de dolor. Empezaban la "jornada de trabajo" a media noche, con progresivas infiltraciones hasta las tres de la tarde y, tras una buena alimentación, dedicaban al descanso nueve horas, en tanto que grupos de relevo, ya descansados, continuaban hostigando al enemigo sin pausa. Bastaron 55 días para presentarse arrolladores ante el canal de Johor y atacar la "inexpugnable fortaleza" el 7 de febrero de 1942.   Soldado japonés hostigando al enemigo tras un árbol de caucho, en la península de Malaca en 1942

La defensa aliada había sido ordenada y valerosa, y ante la isla se combatió con firmeza y orden, pero finalmente se convirtió en desbandada tras ser rotas las líneas australianas (la 18ª División) que defendían Johore con denuedo. Sin atender las órdenes del premier británico Winston Churchill de defender la isla hasta la muerte, se tomaron medidas desconcertantes en la desesperación, como la de, siguiendo órdenes del propio Percival, lanzar al canal los 25 millones de litros de bebidas alcohólicas almacenadas en la ciudad (whisky, cerveza, vinos, champagne) que se sumaron a los combustibles derramados por las embarcaciones dañadas y los numerosos cadáveres en avanzado estado de putrefacción que flotaban en aquellas apestosas aguas, produciendo un hedor insoportable.

Se produjeron deserciones en grupo y se vivió un auténtico "sálvese quien pueda" hasta que se recuperó cierto orden que únicamente sirvió para proceder a la entrega de la plaza (curiosamente, los japoneses habían agotado prácticamente sus municiones y no hubieran podido seguir combatiendo dos días más, pero consiguieron que el enemigo no detectara su desesperada situación). El Teniente General Arthur Percival, dos oficiales de su Estado Mayo y un intérprete, dirigiéndose en Singapur a presentar la rendición incondicional de sus tropas a los japoneses

(C) En 1819 el británico Sir Thomas Stanford Raffles izó la bandera del Imperio (la Union-jack) en la isla llamada "Singa-pura" desde el siglo IV (anteriormente conocida como Temasek, "pueblo del mar" en sánscrito, en tanto que Singa-pura significa "Ciudad del león" basándose en una antigua leyenda local). Se instalaría la sede local del de la Compañía Británica de la Indias Orientales.

Su elección obedecía al interés del gobierno británico en frenar el expansionismo comercial holandés en la región. El territorio comprado al sultán de Johore incluía, como un todo, la isla principal y otras 54 menores e islotes adyacentes. Era el punto ideal para el control de las rutas marítimas que comunican Asia, África y Asia. Ya en 1826, los británicos controlaban el comercio en aquellos mares desde las "establecimientos de los estrechos", Singapur, Penang y Malaca, hasta 1946, cuando Singapur se convierte en colonia de la corona y aquellos se integran en la Unión Malaya.

Aquella isla semi-desierta, convertida en una potencia económica en la zona, tras su enorme desarrollo se ha quedado pequeña y para satisfacer las necesidades de suelo se inició un gran proyecto de "expansión territorial" a base de añadir tierra y arena en sus costas para ganar terreno al mar. La materia prima utilizada en los comienzos fue la de sus montes (había varias cadenas de colinas  con altitudes de 90 a 170 m) cuyas rocas y tierra se utilizaron como material de relleno, quedando convertida la isla en un espacio llano.

Se compró arena y tierra a otras islas vecinas (algunas llegaron a desaparecer) hasta el extremo que los gobiernos vecinos, Malasia e Indonesia, han amenazado a los responsables de la venta de arena con declararlos traidores a la Patria, con las consecuencias penales que ello conlleva.

Por otra parte, además de las derivas ecológicas, se argumenta que se pueden alterar  las características navegables de los estrechos. Actualmente la "isla creciente" cuenta ya con unos 700 Km2 y se pretende ganar al mar con el último proyecto otros 60 Km2.   La draga mayor del mundo "Cristóbal Colón" botada en Sestao (Vizcaya) en julio de 2009, se proyectó para extraer arena del fondo del mar a 142m de profundidad para rellenar los proyectos de ensanche de la isla de Singapur.

El incremento de la población, mayoritariamente de origen chino, se trata de controlar, llegando actualmente hasta casi cinco millones y estar previsto su pronto acercamiento a los seis millones.

CUBA

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