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En
1.940, el ejército danés se hallaba en unas circunstancias muy
especiales. Su país había sido invadido por Alemania bajo el
pretexto de defender Dinamarca de una invasión maquinada por los
aliados.
En
la madrugada del 9 de abril, tropas acorazadas alemanas habían
atravesado la indefensa frontera de Jutlandia sin apenas disparar un
tiro, salvo alguna escaramuzas con pocas consecuencias. En Copenhague,
custodiado por buques de guerra, el
mercante alemán Hansestadt Danzig desembarcó un batallón que tomó inmediatamente la ciudadela
y el palacio real de Amalienborg tras un ligero intercambio de disparos.
Nuevos contingentes de tropas fueron desembarcadas en Fyen y Zealand. (*)
Antes
del mediodía toda Dinamarca había sido invadida. El rey Cristian X
aceptó las condiciones impuestas por los invasores y se dispuso, con su
pueblo, a soportar la "ocupación amistosa", mientras, la Luftwaffe
sobrevuela amenazadoramente la capital.
La
sorpresa fue general, pues los alemanes habían guardado perfectamente
el secreto de la operación
"Weserübung" (ejercicio
Weser) que abarcaba el " Wueserübung
Sud" (la ocupación de Dinamarca) simultáneamente con el
"Weserübung Nord" (el asalto a Noruega).
El rey Cristian X llegó a manifestar, durante unas conversaciones
confidenciales al general Kurt Himer, jefe de las fuerzas invasoras,
"¡Otra vez ustedes los alemanes han hecho cosas increíbles! Hay
que admitir que han hecho un trabajo magnífico...". Pero estas
manifestaciones de soldado impresionado por la astucia de su enemigo no
suponían colaboracionismo ni aprobación de la política del Reich, y
demostró su entereza cuando se iniciaron las deportaciones de judíos,
oponiéndose tenazmente a los nazis y amenazando con colocarse la
estrella de David sobre su uniforme en apoyo de los perseguidos.
Tras la total ocupación, el ejército danés no fue disuelto.
No obstante fue progresivamente retirado de Jutlandia y paulatinamente
concentrado en Sjaelland y en la isla de Funen. Finalmente fue reducido
hasta la mitad de sus efectivos, quedando en una fuerza de 3.300
hombres.
En
el momento de la invasión las tropas danesas se hallaban
equipadas con cascos Mº 23, grandes
cascos de ala ancha, de forma original, que se identificaban
inconfundiblemente.
Estaban
pintados generalmente de color marrón (y
en gris verdoso) y presentaban frontalmente el emblema del
ejército (Haermaerket)
que reproducía las armas de la casa reinante Schleswig-Holstein
Sonderburg.
Los cascos de la Marina
de Guerra ostentaban un ancla coronada, también de latón oxidado
(posteriormente será sustituida por una calcomanía del ancla
coronada sobre una escarapela con los colores nacionales, rojo,
blanco, rojo).
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Casco danés Mº 23 |
La
situación danesa resultaba muy particular. Oficialmente no se
encontraba en guerra con Alemania. Tras la primera protesta formal, el
rey y el gobierno danés, ante los hechos consumados, habían tenido que
ceder y aceptar un extraño modus vivendi en el que Alemania
"garantizaba la independencia danesa". La población civil no
percibió la situación real hasta mucho más tarde, cuando aumentaron
las presiones de los invasores para obtener mano de obra. Hasta finales
de 1.941 la opinión pública, que se había dejado influir por el
comportamiento de su gobierno, no comprendió que era ilusorio creer que
gozaban de libertad. Será en esas fechas, una vez caída la venda de
sus ojos, cuando apareció una variada prensa clandestina apoyando la
creación de numeroso núcleos de activistas. (**)
Mientras
tanto, se mantenían las formas en la vida industrial y política
oficial. La
firma danesa A/S
GLUD & MARSTRANDS que se
había encargado de la fabricación del casco Mº 23, el primer casco
nacional danés, ya había entregado la cantidad de 81.000 cascos al
ejército, marina y policía.
Como
durante la ocupación, el ejército mantenía sus normales necesidades de
equipamiento (el rey no había firmado el decreto
de movilización general), siguió recibiendo los encargos efectuados con
anterioridad a los fabricantes.
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En
1.939 se había recibido una última remesa de cascos Mº 23 (de
los cuales se prestó una cantidad a la policía) numerados del 74.001
al 80.820 (con ellos el ejército danés alcanzaba la cantidad de 75.678
cascos recibidos). Estos cascos contaban con ciertas particularidades que
los diferenciaban sustancialmente del Mº 23 de combate. (***)
También
se había encargado una partida de 10.000 nuevos cascos para el
ejército danés. |
Pero
las circunstancias habían cambiado y estos últimos cascos sufrieron algunas
variaciones que los definen como Mº 23-40.
Las carencias de materia prima obligaron a pequeñas economías que
llegaron a afectar incluso al emblema frontal de latón que fue sustituido por
un simple remache del mismo material.
La guarnición mantenía sus
principales características.
El zuncho para la
guarnición-sudadera, se halla fijado al casco por 4 remaches
abiertos, dos de los cuales, los laterales, también sujetan las
patillas para las anillas basculantes del barboquejo. |
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La guarnición, cosida
literalmente a este fuerte zuncho metálico, fue perfeccionada,
simplificando algo su diseño. |
Zuncho metálico
remachado |
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Fabricada en cuero claro, mantenía
las 8 lengüetas con ojeteros metálicos para el lazo, y las pequeñas ranuras de aireación.
Su acolchado se mejoró
sustancialmente, incluyendo 4 saquetes más mullidos en una
funda continua, cosida al cuero de la sudadera. |
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Funda cosida para los saquetes. |
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Bajo el cuero de la
sudadera aparece un sello de tinta, referido a la talla, y
otro con las tres coronas.
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Sello de
las 3 coronas (lengüeta de la derecha) parcialmente
tapado por la funda de los saquetes. |
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Colocación de un saquete |
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En los cascos
posteriormente destinados a la Defensa Civil (Civilforsvaret),
se estampó un sello de tinta negra con una
corona y las letras C F. en la zona vista del cuero de la guarnición.
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"CF" bajo
la corona real en un casco destinado a la (Civilforsvaret) |
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El
barboquejo, de cuero de dos piezas (cosidas a las anillas del casco), tiene hebilla
metálica para su ajuste y es
algo más estrecho el tramo que debe pasar por ella.
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La
anchura del barboquejos de 19mm., disminuye
hasta 15mm. en la zona perforada que se introduce en
la hebilla. |
Siguieron
fabricándose en dos tallas, una normal: la talla "II", el 90% de la
producción, y la talla "I", grande, que representaba el 10%
restante de los fabricados.
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Aunque la
distancia entre los límites máximos de las alas sólo se diferenciaba
en 10 mm. (de 290 a 300 mm.), en el desarrollo final se aprecia una gran
diferencia de tamaños entre las tallas. |
Esta proporción se considera razonable tras el estudio antropológico
correspondiente. Se mantienen las medidas de 232mm. entre las alas para
la talla II normal, y 235mm. para la talla "I" grande. Conserva el
reborde de 10mm. con el junquillo metálico que remata todo el casco.
Se mantuvo la tradicional ranura posterior para su transporte.
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Sus características dificultaban la utilización de fundas anti-reflejos,
por lo que se intentó solucionarlo mediante pintura rugosa mate.
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Los Mº
40 que llevaron pintura rugosa emplearon la misma que en el Mº
23
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Gran
número de estos nuevos cascos Mº 23-40 fueron utilizados por los
movimientos clandestinos, grupos que combatían a los invasores mediante
sabotajes.
Particular pieza
con aireación posterior a base de dos orificios
reforzados, propios de la primera remesa de 5.000 cascos
Mº 23, readaptado tardíamente. (Ver:
Casco danés Mº 23).
Col: M.
Guadalupe. |
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Para su identificación emplearon diversas siglas y emblemas.
Como consecuencia de esta presencia, se crearon los grupos de
represión "Schalburgkorps" para combatir a los
partisanos, (unidades que se formaron con alemanes y daneses
colaboracionistas).
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Irrupción
de tropas partisanas colaborando a la liberación, portando
mayoritariamente cascos Mº 23/40 (salvo el primero de la
izquierda que se protege con un casco de color negro Mº 39 de
la policía danesa) |
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En
agosto de 1943, ante la negativa del gobierno danés de
declarar el estado de excepción ante la alarmante actividad de los
saboteadores, el general alemán Von Hanneken promulgó la ley marcial,
ocupando Copenhage y desarmado el resto del ejército danés. Desde ese
año fue frecuente la pintura negra en los cascos utilizados por
diversas organizaciones, tanto de la resistencia como de las tropas de asalto (Storm Afdelinger) danesas colaboradoras de las tropas de
ocupación alemanas. (****)
|
Casco Mº 23/40,
en color negro, y con una numeración pintada en su frontal.
El emblema ha sido sustituido por un gran remache y carece del
frecuente orificio más bajo. Col: J. Neila. |
El fabricante,
como ya había venido haciendo con todos los cascos entregados, marcó
las unidades de la nueva remesa con una placa remachada al zuncho internamente, numerada del 81.000 al 92.000. No
obstante, los recibidos en 1939 con placa de latón
numerada, ya presentaban similares características.
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En estos casos: |
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" A/S GLUD
& MARSTRANDS FABRIKER. Nº 72159" (remesa de 1939). |
" A/S GLUD
& MARSTRANDS FABRIKER. Nº 81128" (remesa de 1940). |
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La
existencia de abundantes planchas de acero (algo más delgadas de
las estándar) en los almacenes del fabricante animaron al ejército a
requerir la fabricación una nueva remesa de cascos Mº 23-40 (aunque
más ligeros), pero el pedido a la
A/S GLUD
& MARSTRANDS FABRIKER de una partida de 11.000 unidades
se retrasó hasta la primavera de 1.943.
Finalmente los sabotajes impedirán su fabricación.
El
malestar civil iba creciendo de forma evidente hasta que la
brutalidad de los grupos "Schalburgkorps"
y los abusos de las fuerzas ocupantes provocaron una verdadera sublevación en la
capital en junio de 1.944.
Diferentes
unidades de voluntarios daneses se aprestaron a combatir junto a
los aliados, favorecidos por las buenas comunicaciones con Suecia.
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Efectivos
de la Brigada Danesa, portando cascos suecos, son
trasladados
a Copenhague. Esta unidad, de 5.000 daneses exiliados, había sido
formada, equipada y adiestrada en Suecia, como "Cuerpo
de Policía" con el visto bueno de las autoridades
suecas. |
El
5 de mayo de 1.945 se produjo la liberación de Dinamarca, aunque hasta
dos días más tarde no fueron sofocados los últimos focos de
resistencia alemana. La claudicación alemana hizo innecesaria la
participación del ejército danés equipado en el exterior.
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En
los cascos daneses del Mº 23/40 no estaba previsto el emblema
tradicional, pero posteriormente se insertó uno nuevo en
una posición más baja, que más tarde fue
sustituido por un adhesivo.
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Cascos
Mº 23/40, el segundo presenta el segundo orificio frontal. |
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La
reposición de las guarniciones deterioradas por su uso se
efectuó mediante unas nuevas, de forma similar, pero carentes de
las pequeñas ranuras de aireación y con un sistema mejorado de
saquetes de acolchamiento.
Además, los barboquejos
pasarían a sujetarse mediante un remache y su anchura de 19 mm. lo sería en
toda su extensión. |
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Barboquejo
sujeto con remache y guarnición de cuero sin ranuras. |
Algunos
cascos fueron utilizados en la postguerra por unidades del ejército
y Policía o Policía auxiliar.
Un nuevo emblema frontal,
más sencillo, con el óvalo que incorpora los tres leones sin la
orla de hojas, fue el elemento identificador. Su uso fue mi
limitado.
(*****)
|
Emblema policial danés. |
Casco Mº 23/40 de policía. Col: P. Baenas. |
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Después
de la guerra se estimó conveniente dotar a las fuerzas armadas
danesas de un nuevo casco nacional.
Un primer modelo, de diseño
similar al danés, contó con una guarnición tipo MK-II inglés,
sustituida más adelante por una nueva de plástico.
Poco después
se adoptó como reglamentario el casco de tipo americano M-I.
(Ver Casco Danés Mº
48)
|
Soldados
daneses equipados con cascos tipo M-I en 1956, en una unidad
al servicio de la ONU e Egipto. |
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|
El sistema de guarnición de estos cascos M-1 sirvió de modelo
para modernizar un buen número de cascos Mº 40 destinados al Defensa
Civil (Mº 40/41).
Externamente presentan la nueva serie de 6 remaches destinados a
sustentar la guarnición, mas otros 2 para el barboquejo. Los
orificios de la primitiva guarnición se respetan para |
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La nueva guarnición, tipo Riddell
estaba fabricada con tejido sintético color gris. Por su parte el barboquejo, en tejido
verde caqui, se ajusta y engancha también como el del Mº M-1
norteamericano.
|
Guarnición
adaptada a un casco Mº 40 (41). Col: R. Klokocnik. |
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El barboquejo, en
tejido sintético verde, se sujeta con un simple remache, sin
anilla. |
En
la actualidad un nuevo casco, en Kevlar, ha sido distribuido a
todo el ejército.
(*)
Las bajas en la península de Jutlandia fueron estimadas en 20 heridos
alemanes, y 13 muertos y 23 heridos por parte danesa.
(**)
Si bien en 1940 no existió un rechazo real a la invasión alemana,
aunque tardíamente, se fueron creando importantes grupos armados
clandestinos ayudados y abastecidos constantemente por Gran Bretaña. Ya
con la invasión alemana a la URSS en junio de 1941, al igual que
sucedió en Francia y otros países, los comunistas daneses comenzaron a
organizar la resistencia, creando el BOPA (Borgerlige Partisaner)
que, junto con el Holger Danske (denominado así en memoria del
mítico personaje danés), sería uno de los principales grupos de
sabotaje. Pero la policía, colaborando con los
alemanes, detuvo a 200 de sus componentes. No obstante, no sería hasta
mediado de 1943 cuando se consiguió un organización coordinada a nivel
nacional. Finalmente se había conseguido el Consejo Danés de la
Libertad por la agrupación de los principales grupos que operaban
independientemente: El Partido Comunista Danés, activo en la
clandestinidad; el Ringen (una serie de pequeñas agrupaciones
informativas y con algunas actividades de tipo militar. La Frit
Danmark (Dinamarca Libre), que comprendiendo elementos de diversos
partidos, se dedicaba a la propaganda clandestina; la Dansk Samling
(Unión Danesa), una asociación cristiana que, bajo una imagen de
aparente legalidad, se dedicaba a efectuar diversas actividades
clandestinas. Durante este periodo, la actividad más importante
consistió en la impresión y distribución de 538 periódicos
clandestinos, algunos con tiradas de cientos de miles de unidades (en
1940: 1.200 ejemplares; en 1941, 40.000; en 1942, 301.000; en 1943,
2.6000.000; en 1944, 10.935.000; en 1945, 10.131.000 ejemplares). A
estos datos hay que sumar los 298 libros y folletos que sumaron, a su
vez, 983.147 ejemplares.
(***)
Según los últimos datos fiables sobre la producción de cascos daneses
Mº 23 y 23/40, se puede resumir de la siguiente forma:
|
Hasta
marzo de 1935 el total de cascos era que de 57.858 piezas, procedentes
de la primera partida numerada de 01 a 58.000.
Esta
cifra resultaba insuficiente, por lo que se produjo una segunda remesa
de 5.000 cascos que se numeraron de 58.001 a 63.000.
En
agosto de 1.935 se pidieron otros 6.000 cascos y fueron numerados del
63.001 a 69.000 (en este año el número de cascos era de 67.105.
Muy
pronto se llegaron a producir hasta 74.000 cascos, que se almacenaron
para stocks y/o se prestaron al
cuerpo de voluntarios, policía y otros.
En
mayo de 1.939 se cursó un nuevo pedido a la compañía “Glud &
Marstrand", recibiéndose en septiembre numerados del 74.001 al
80.820.
Nuevamente
se pidieron 11.000 más. Debían ser entregados en febrero de 1.940,
pero la situación ya no era normal y las dificultades se multiplicaban.
Ello hizo que los primeros se recibieron en diciembre. Fueron numerados
del 81.946 al 92.045.
El
último pedido se cursó en abril de 1.943 y deberían numerarse del
102.946 al 113.045.
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encargo |
Fecha
entrega
|
partida |
numeración |
Total
s/pedido
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Total real
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3/1935 |
57.858 |
01-58.000 |
57.858 |
57.858 |
|
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|
5.000 |
51.008-63.000 |
62.858 |
|
|
|
8/1935 |
|
6.000 |
63.001-69.000
|
68.858 |
67.105 |
|
|
5/1939 |
|
6.820
|
74.001-80.820
|
75.678 |
|
|
|
2/1940 |
12/1940 |
11.000 |
81.946-92.045
|
86.678 |
|
|
|
4/1943 |
|
|
102.946-113.045 |
|
|
|
(****)
Los
sabotajes que en 1942 habían sido 122, ascendieron en 1943 a 969. En
1944 esta Resistencia comprendía unos efectivos superiores a 20.000
hombres. Su
colaboración con los aliados fue decisiva en los últimos momentos. Los
aliados temían que las tropas alemanas en Dinamarca fueran reforzadas
con la llegada de los 400.000 soldados situados en Noruega y ser
acosados por la espalda en el avance aliado hacia Berlín. Por ellos
resultó particularmente importante para los aliados su actuación
durante el invierno 1944/45 con el sabotaje de la vías ferroviarias que
impediría la retirada de las tropas alemanas de Noruega con destino a
fortalecer la defensa de Alemania (el número de sabotajes de esta
última campaña alcanzó la
cifra de 1.629 acciones, reduciendo al 25% el ritmo normal ferroviario).
Por otra parte, fueron abundantes los sabotajes a fábricas que
producían material bélico para Alemania, pues eran conscientes de que,
de no encargarse los daneses de anular su producción, serían los
bombarderos aliados los que se encargarían de destruir los objetivos. El momento más crítico se produjo en junio
de 1944 con la huelga general en Copenhague, que paralizó totalmente
fábricas, transportes, comercios, teléfonos, etc, que estalló como
protesta por la prohibición alemana de que se celebrara la festividad
de San Juan, muy venerada por el pueblo danés. En aquella fecha
afloraron los grupos clandestinos pero de forma un tanto inconexa y
precipitada. Ante la seguridad de que se produjera una verdadera
carnicería, las autoridades ordenaron reanudar el trabajo. Los
alemanes, por su parte, debieron disolver el ya tristemente célebre
grupo de las S.S danesas Schalburg, pero, a su vez, desarmaron la
policía danesa por considerar que colaboraban con los grupos
subversivos (2.000 de sus agentes fueron deportados al campo de
concentración de Buchenwald).
Tras
la rendición alemana ordenada por Doenitz (Hitler ya se había
suicidado) el 5 de mayo, que abarcaba las tropas de Alemania
nor-occidental, las islas alemanas, Holanda y Dinamarca, la Resistencia,
coordinada por el Consejo de la Libertad, se hizo cargo inmediatamente de los puntos claves de la capital. A
partir de ese momento pudieron verse miles de cascos Mº 23/40 pintados
de negro o gris verdoso por toda la ciudad de Copenhague.
La rápida
presencia de los 5.000 hombres la Brigada Danesa procedente de Suecia
hizo innecesario el avance en fuerza aliado. Los daneses respiraron
tranquilos ya que se habían evitado las dos situaciones más temidas:
el combate final sobre su país y la llegada de la tropas soviéticas
(ya muy cercanas a la frontera danesa).
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(*****)
Hubo otro emblema, orlado de hojas, pero formando un círculo más
despegado. |
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